Comportamientos violentos en la convivencia escolar de los niños niñas de 10 Años

Abstract

La convivencia escolar proporciona al niño un contacto directo de interrelaciones personales con el medio que lo rodea. El niño va evolucionando en sus relaciones afectivas y en cada momento desarrolla determinadas actitudes, intereses específicos y comportamientos concretos. Dentro de esta evolución el niño pasa por diferentes etapas y cada una de ellas posee rasgos característicos de tipo afectivo, psicomotor, intelectual y social. Es necesario que la escuela, familia y maestros tengan en cuenta los diversos niveles de maduración y aspectos sociales donde se desenvuelve el niño en su convivir diario. En consecuencia, dentro de esta perspectiva, se enmarca la investigación denominada: “Comportamientos violentos en la convivencia escolar de los niños y niñas de 10 años, cursantes del 4to grado C, en la UE Teotiste de Gallegos. Valencia. Edo Carabobo”. El propósito fue “comprender los comportamientos violentos en la convivencia escolar de los niños y niñas de 10 años” El estudio está fundamentado en los aportes de Jean Piaget y Inhelder (1982), Lev Vygotsky (1983), La teoría de Erikson (1969) y la teoría ecológica de Bronfenbrenner (1987), las cuales aportaron conocimientos en cuanto a la convivencia y la interrelación personal en el desarrollo social, cognitivo y psicológico en los niños. Por ser una investigación de enfoque cualitativo estuvo guiada metodológicamente por un estudio de caso único, utilizando la observación participante, la entrevista no estructurada y revisión de documentos como técnicas de recolección de información. Para el análisis de la información se procedió a la clasificación, categorización y triangulación de la misma., evidenciándose que los comportamientos violentos en la convivencia escolar de los niños de 10 años, son comprendidos como un cúmulo de emociones profundas negativas que se hace el niño sobre sí mismo, caracterizada en una autoestima baja, la cual es producto de la carencia de patrones de conducta positiva y sana en la convivencia familiar; donde el niño pueda identificar su personalidad de forma armoniosa.